Todo el mundo sabe lo que es un médico forense: un médico dedicado a examinar los cadáveres por muy diversas razones. Los más míticos son los médicos forenses de la policía, dedicados a estudiar las causas de fallecimiento de una persona cuando puede haber un crimen de por medio, pero hay más tipos de forense, como los que se dedican a buscar en los cadáveres para investigar la causa de la muerte de alguien, por el avance de la medicina en si. Me decidí a describirlo porque creo que es un contacto que puede dar mucho más juego del que parece a primera vista. Vamos allá.

Un forense se dedica a trabajar con cadáveres desde la perspectiva médica, como se dijo arriba. Es común que sean miembros de la policía, o tengan lazos fuertes con ella o con algún otro departamento legal (fiscales, el FBI, etc.). Pero, sin embargo, hay un departamento de forenses (oficial) especial que cabe destacar: la magia forense. Son magos que se dedican a dictaminar causas de crímenes en base al estudio de auras de una zona, rastros mágicos y demás. Realmente, estarían más cerca de la policía científica que de la forénsica tradicional, aunque también pueden estudiar cadáveres con su magia.

¿De qué os puede servir un forense de vuestro lado? Primero, porque es un policía, y os puede dar información de dentro. Segundo, os puede mantener al tanto de los crímenes recientes cometidos, o cosas por el estilo. Pero, más interesante que todo eso, el forense puede analizar muestras y cadáveres. Le podéis llevar un poco de piel y sacará la cadena de ADN, o conocerá gente capaz de ello; una vez con la cadena de ADN y un buen tecnomante podéis quizás encontrar a qué SIN pertenece... ese es tan sólo un ejemplo de las múltiples ocasiones en que un forense os puede venir bien.

Citas:

-Bueno, múltiple fractura craneal debido a un golpe fuerte, quizás debido a la caída, pero hay algo extraño: hay otro golpe, más débil, en la parte lateral derecha del craneo. Es un golpe anterior, y probablemente el que causó la muerte...

-Con que si te puedo analizar este trocito de piel para pronto, ehhh, ya estamos como siempre.

-Eso era un componente químico-orgánico potente, no te molestaré con la fórmula. Baste decir que tuvo suerte de sobrevivir durante esas doce horas...

Comentario:

Antiguamente pensaban que hacía falta nigromantes para hablar con los muertos, pero ya no. El forense dialoga con los cadáveres y extrae sus respuestas en forma de pruebas: cristales rotos, golpes, muestras de sangre, ... luego une todo para conformar un total coherente que explica lo que nadie más podría descubrir.

Fuerza: 3  

Constitución: 2

Rapidez: 3

Inteligencia: 5

Carisma: 3

Voluntad: 4

Esencia: 6

Magia: No

Iniciativa: 4+1d6

Biotecnología (forénsica): 7 (9)

Etiqueta (policial): 2 (4)

Conocimiento de leyes: 2

Armas cuerpo a cuerpo (bisturí): 1 (4)

Computadoras: 2

Coche: 3

Conocimiento anatomía: 6

Ciberimplantes:

Ninguno

Nivel de profesionalidad: 

2

Contactos:

Algunos entre la policía, los fiscales y el mundo médico

                                     

Donovan Suthanson:

Donovan nació en Boston, y mantiene el acento del área. Canoso y un poco encorvado por el peso de los años y deformación profesional, no ha perdido un ápice de su negro sentido del humor. Su piel negro oscuro contrasta fuertemente con sus ojos azules, capricho genético heredado de algún antepasado olvidado. Ha pasado más años de su vida dentro del laboratorio forense de Lone Star en Seattle de los que ha pasado fuera, y la gente bromea con que se habla más con los cadáveres que con su mujer. Es un buen hombre, aunque quizás un poco moral de más. Sus años de estudio en medicina y derecho (carrera que abandonó sin completar) le han regalado unas delgadas gafas, que usa para ver de cerca.