Munición de hielo:
La munición de hielo es un nuevo tipo de balas que acaban de llegar al mercado y están pensadas para cumplir las necesidades de los francotiradores más profesionales, especialmente los asesinos. Se venden en pequeños estuches metálicos frigoríficos que pueden contener 1 o 5 balas, según el tamaño. Una vez sacadas del estuche, estas balas comienzan a descongelarse. El tiempo antes de la descongelación completa está un poco por encima del medio minuto. El beneficio de estas balas es que no dejan señales que puedan unir al asesino con su víctima, ni ningún tipo de rastro balístico o similar; como desventaja está el limitado tiempo que se tiene para dispararlas, así como el hecho de que la armadura las afecta mucho. Sin embargo, esto último no debería ser problema ya que el francotirador debería ser capaz de acertar en la cabeza si merece ese apelativo.

Reglas:
La munición de hielo dura 10 rounds antes de comenzar a descongelarse. Una vez que empieza, pierde la mitad de su potencia al primer round, la mitad de lo que queda al siguiente, y luego se ha terminado de descongelar. Por otro lado, si una caja de cinco es abierta y luego se vuelve a cerrar, las balas perderán ese tiempo de duración antes de descongelar y, si han pasado más de 5 rounds, darán un penalizador de -1 al impactar porque lo descongelado se habrá vuelto a congelar de formas no previstas.
Además, dan +1 al daño, y +1 a la penetración de armadura.
Coste: 100 nuyen la caja de una, 400 la de cinco (van todas en una).

Balas transporte:
Las balas transporte son unas balas un poco más grandes de lo habitual, destinadas a servir de transporte de chips o pequeñas cosas de ese tamaño. La punta de estas balas es muy dura y plana, hecha de manera que en vez de perforar sólo golpee, con lo cual no entra muy a fondo en el lugar al que se dispara y se puede recoger con relativa facilidad. Una vez hecho esto, se coge la bala y se presionan dos delgadas bandas laterales, haciendo que se abra el compartimiento de nuevo y se pueda recoger lo allí colocado. Como nota final, decir que lo mejor es disparar estas balas con armas poco potentes (lo mejor es con pistolas de autodefensa) ya que las armas potentes (como los rifles de francotirador) pueden lanzar la bala con tanta fuerza que sea irrecuperable; si esto pasa, siempre se puede intentar sacarla con unas tenacitas o algo así, pero no es muy discreto.

Reglas:
Sus modificadores son -3 al daño, -3 a la penetración de armaduras.
Si aún con modificadores y todo, la bala hace daño, se habrá incrustado en la persona u objeto contra el que se disparó. Recuperar el contenido de las balas requiere una acción compleja si no ha penetrado en el objeto (no hubo daño), y una acción compleja más por cada punto de daño que haya hecho.